Algunos deportes que se pueden llevar a cabo en la naturaleza con el perro son el running o el trekking. Como su nombre indica, el running con perros, consistirá en correr con el perro, unidos por una correa; mientras que el trekking con perros, consistirá en hacer senderismo pero acompañado del perro.
Con estos deportes, además de disfrutar y compartir experiencias juntos, se consigue estrechar la complicidad existente entre dueño y perro.
En ambos casos, antes de comenzar a llevarlos a cabo, se han de tener en cuenta una serie de aspectos, tanto propios del perro como externos a él:
Aspectos propios del perro
Edad. Es importante esperar a que el perro se haya desarrollado por completo, ya que de lo contrario, si realiza una actividad física intensa podría sufrir lesiones en sus articulaciones.
Forma física. Se ha de ser paciente y no exigir al perro más de lo que puede ofrecer. Se comenzarán con niveles sencillos y se irán aumentando progresivamente.
Raza. Cierto es que no todas son aptas para ciertas actividades, como son las que presentan problemas respiratorios o extremidades cortas, pero se pueden llevar a cabo si se adaptan a sus necesidades.
Aspectos externos al perro
Accesorios. En ambos deportes se precisarán de ciertos accesorios para su correcta realización, con los cuales, tanto dueño como perro se han de sentir cómodos y tener libertad de movimientos, por lo que deberán adquirirse en una tienda especializada.
Realización. Se ha de elegir el momento idóneo para realizar el ejercicio, evitando las altas temperaturas y los lugares soleados, siendo imprescindible llevar todo el agua posible, y realizar los descansos oportunos.
En el caso del running hay que evitar suelos duros como el asfalto, ya que podrían dañar sus patas y sus articulaciones.
Sea cual sea la elección que se haga, es aconsejable llevar al perro al veterinario para conocer si es apto para la realización del ejercicio o no.