Rodrigo Rato, Presidente de Bankia, se ha mostrado exultante tras la salida a Bolsa, el pasado mes de julio, de la entidad que actualmente preside.
Para el ex-Presidente del Fondo Monetario Internacional (FMI), los mercados económicos le han dado finalmente la razón.
Dicha actitud radica en que la puesta en largo de Bankia hubiera sido imposible de realizar en la situación actual, debido a las turbulencias financieras que azotan los mercados y la desconfianza que sobrevuela a la economía española.
El actual mandatario de Bankia siempre fue partidario de que la salida de Bankia a la Bolsa, fuera “lo antes posible”, debido a una posible coincidencia con el adelanto de las Elecciones Generales (como así ha ocurrido).
También, porque la incertidumbre económica que existía a mediados de julio, podría mantenerse en agosto e incluso aumentar, por lo que la decisión llevada a cabo en dicho momento, estuvo influida por el miedo a un posible desplome de las Bolsas, el aumento de la prima de riesgo hasta máximos históricos y la falta de medidas de choque, por parte del Gobierno español, para contrarrestar la crisis de deuda de la economía nacional.