Recorren el planeta en busca de pedazos de materia cósmica que se estrellan contra la Tierra, son “cazadores de meteoritos”, una profesión a la que se dedican en cuerpo y alma aventureros como José Vicente Casado.
Casado afirma que “localizar meteoritos es mi forma de vivir, es mi oficio”. Durante la entrevista ha querido desmitificar algunas de las falsas leyendas que rodean a estos cuerpos cósmicos.
“La gente observa constantemente meteoritos por todas partes y, además, creen que son gigantescos, que van a desplomarse sobre nosotros y que nos extinguirá como a los dinosaurios”, comenta entre risas.
La gente piensa que abundan por todos lados, pero encontrar uno es “algo increíblemente extraordinario”, porque aunque se contemple una estrella fugaz en el horizonte y se suponga que está próxima a nosotros, puede aterrizar a miles de Km.
Respecto a este asunto, aclara que “todos los días caen sobre la superficie del planeta entre 20 y 40 toneladas de polvo cósmico, aunque meteoritos propiamente dichos, se estima que pueden caer unos 20 o 25 al año”.
“Aparentemente son rocas de lo más comunes, por lo que hay que utilizar un pequeño microscopio para comprobar si son auténticas. En ocasiones creemos que son y no lo son y otras veces sucede al revés”, señala.
Casado, que lleva más de 15 años “cazando meteoritos” y que tiene una colección próxima a las 120 piezas, la más completa de España según apunta, comenta que en todo el planeta no existirán más de 20 personas que tengan dicha profesión.
Su modus operandi consiste en desplazarse a zonas desérticas de África y América del Sur, donde resulta más fácil identificar la presencia de estas rocas “a simple vista”, ya que no hay vegetación que pueda ocultarlos.
Casado, que también se dedica a ofrecer conferencias y organizar exposiciones, la próxima semana ofrecerá una en el Museo de la Siderurgia y la Minería de Castilla y León (MSM), con sede en Sabero (León), donde se presentarán algunos ejemplares y se detallarán cuestiones como el origen y desarrollo del sistema solar y el nacimiento de la vida.