Los platos elaborados con garbanzos son muy típicos en España, como es el caso del cocido o del potaje. Por este motivo, y para facilitarte la tarea en la cocina, te traemos esta receta para tu bebé, muy parecida al potaje y que sin duda le encantará.
Ingredientes
– 1 puñado de Garbanzos.
– 1 puñado de Arroz.
– 1 Zanahoria.
– ½ Puerro.
– Judías verdes (frescas o congeladas).
Elaboración
Antes de comenzar la receta, lávate bien las manos y asegúrate que las tienes libres de anillos.
– Comienza cociendo los ingredientes, para lo cual, sírvete de una olla rápida para que el tiempo de cocción se reduzca considerablemente, si por el contrario, no posees una, ten en cuenta que el tiempo de cocción no será el mismo.
– Para que los garbanzos se cuezan bien, cúbrelos con agua en un bol el día anterior, y cuando vayas a elaborar la receta, lávalos bien antes de echarlos en el agua de cocción.
– Coloca la olla con el agua a calentar, y añade los garbanzos lavados. Asegúrate de que el agua cubre los garbanzos, sino, añade más agua hasta conseguirlo.
– Lava y pela (en el caso de la zanahoria) bien las verduras, troceándolas en cachitos pequeños, para que tu bebé los pueda comer sin problemas.
– Añade el puerro, la zanahoria y las judías verdes a la olla junto a los garbanzos, y deja cociendo el conjunto durante unos 30 minutos.
– Pasado el tiempo de cocción, espera a que se enfríe la olla y, posteriormente, añade el arroz, el cual, deberás cocer junto a la legumbre y las verduras durante 5 minutos.
– Es recomendable que retires la piel de los garbanzos para evitar atragantamientos o repulsiones en tu pequeño, así como los famosos gases que provocan.
– Una vez enfriada la olla, cuando ya no tiene vapor ninguno dentro, ábrela, dejando que temple un poco, sin que llegue a enfriarse.
Y ya tienes listo tu plato de Garbanzos con arroz y verduras para que se lo des a tu pequeño. Este plato, puedes dárselo en dos versiones, con algo de caldo, o en puré, dependiendo de la edad que tenga, y vigilando siempre las reacciones alérgicas que puedan darse.
Recuerda que las cantidades de los ingredientes son orientativas, y puedes variarlas según tus necesidades, ya quieras hacer sólo una ración o por el contrario, varias.