José Blanco lleva semanas “tocando los hilos oportunos” para aclarar de dónde procedió la filtración sobre su encuentro con el empresario Jorge Dórribo, en la gasolinera de Guitiriz. Blanco está convencido que fue la Guardia Civil la quien filtró la información a la prensa.
Interior ordenó a finales de la semana pasada iniciar una investigación interna, después de que Pepín Blanco señalara directamente a la Benemérita como “sospechosa principal” de haber filtrado a El Mundo, las declaraciones que realizó el empresario gallego y que incriminaban al ministro.
Después de hacerse públicas las acusaciones de Dórribo, el ministro de Fomento pensó en un primer momento, que la filtración podía haber procedido de su propio partido.
Concretamente, se barajó la posibilidad de que hubiese salido del PSOE gallego, (que en un principio, estuvo muy pendiente de la investigación debido a que implicaba a la Xunta y al PP) para así dificultar su posible candidatura en las elecciones autonómicas de 2013.
Sin embargo, dicha conjetura fue descartada finalmente por José Blanco tras viajar a Galicia, en compañía de Alfredo Pérez Rubalcaba, el pasado domingo 9 de noviembre, tan sólo cuatro días después de la publicación del escándalo en El Mundo.
Fuentes consultadas aclaran que “los compañeros del PSOE regional comentaron al portavoz del Gobierno, que los informes de la operación se encontraban sólo en los juzgados y en manos de los investigadores pertinentes”.
A raíz de esto, las sospechas de José Blanco se trasladaron inmediatamente entonces a la Guardia Civil, y de ahí, que pidiera ayuda al ministerio del Interior.
Veamos ahora como, paralelamente a la investigación de Interior, la Policía inició su propia investigación para determinar la autoría del robo de una serie de discos duros y ordenadores, pertenecientes a determinados administradores concursales, que podrían haber ocasionado dicha filtración.
Y es que paralelamente a la investigación puesta en marcha por el ministerio dirigido por Antonio Camacho, a petición de Pepín Blanco, la Policía Nacional está trabajando para aclarar la autoría del robo de unos ordenadores y unos discos duros, pertenecientes a tres administradores concursales que participaban en la auditoría de las diferentes empresas de Dórribo: “Nupel, Innova y Tramipharma”.
Personas muy vinculadas al caso confiesan que “la principal sospechosa es ahora una empresa de seguridad privada. Los autores del hurto sabían perfectamente cómo actuar, fueron rápidos y eficaces, llevándose todo el material que pudiera contener información relevante. Fueron auténticos profesionales”.
Las mismas fuentes confirman que “la operación Campeón permanece todavía abierta, en busca de más pruebas”. Por el momento, “en los informes oficiales de la investigación, la única mención de la entrega de 400.000 euros a José Blanco es la realizada por Jorge Dórribo”.
Oficialmente, lo único que le consta al equipo de investigadores sobre el caso es “un encuentro entre el empresario y el ministro, en la que Dórribo fue supuestamente enviado por la Federación de Empresarios, para tratar el asunto de unas subvenciones”.