Noruega se prepara para regular el juego online

El juego online sigue acumulando protagonismo entre los mercados de juego nacionales. En este caso, ha sido la Comisión de Cultura del Parlamento noruego la que ha ordenado una evaluación de impacto sobre las propuestas que pretenden liberalizar el mercado del juego online en Noruega.

Svein Harberg, presidente de la Comisión de Cultura, ha mostrado su apoyo a las nuevas leyes para regular el juego online en Noruega. «Debemos considerar todas las opciones para así conseguir que los juegos de azar, los cuales, ya están operativos, sean ahora regulados«, explicó el funcionario refiriéndose a la actividad actual de los sitios de juego online no autorizados.

Actualmente en Noruega opera un duopolio en donde sólo dos operadores poseen licencia, los cuales, son responsables de todos los juegos de azar en el país. Un nuevo gobierno electo el año pasado, expresó su deseo de liberalizar el mercado del juego online noruego a los operadores offshore, legalizando y regulando el poker online, actividad que se encuentra prohibida bajo el marco jurídico actual.

A este respecto, cabe mencionar que un informe elaborado hace 4 meses para analizar los posibles problemas de la legalización de los juegos de azar online, concluyó que el poker online era una modalidad de juego con un riesgo relativamente bajo. Otro informe distinto afirmó que el juego online ilegal en Noruega reportaba unos 150 millones de euros en ingresos brutos, de los cuales, el fisco noruego no recibía ni un sólo euro.

Así pues, la forma en la que se articulará la legislación del juego online todavía no ha sido decidida. Las propuestas iniciales fueron pospuestas, ​​mientras el Gobierno estudia la fórmula que permita adaptar dicho marco jurídico a los tratados de la Unión Europea.

En este caso, a pesar de que Noruega no es miembro de la UE, sí que lo es del Área Económico Europeo (EEA), un grupo que se rige en gran medida por lo establecido en los tratados de la UE. De este modo, Harberg afirmó que «el comité tendrá en cuenta la experiencia de otros países, entre ellos, Suecia, Reino Unido, Dinamarca y Finlandia, antes de elaborar sus propias propuestas«.