Londres pretende erigirse en la capital mundial del Bitcoin

El ministro de Economía del Reino Unido, George Osborne, ha decidido anunciar su intención de regular las divisas virtuales. A este respecto, políticos británicos ya están fomentando su uso y establecimiento en el país a través de una serie de regulaciones para que en los próximos años la ciudad se convierta en el centro neurálgico de este método de pago virtual, haciendo de Londres la capital mundial del Bitcoin.

Así pues, Osborne afirmó durante su intervención en la feria tecnológica Innovate Finance, que «estudiaremos el potencial del que disponen las divisas digitales para obtener cambios positivos e incentivar la innovación en el sector financiero mundial, aunque también analizaremos los riesgos«. La intención del Ejecutivo de David Cameron radica en estudiar cómo regular este tipo de monedas desde el país, impulsando con ello a Reino Unido para que se convierta en la capital de la innovación financiera, y así potenciar a Londres frente a otras grandes plazas financieras como Shanghai o Nueva York.

«Estos sistemas de pago alternativos se han popularizado enormemente, debido a que son rápidos, baratos y prácticos, por lo tanto, deseo ver si podemos realizar un mayor uso de ellos en beneficio de la economía del Reino Unido y de los consumidores británicos, aunque eso sí, siempre estando al tanto de los posibles riesgos inherentes a cualquier nueva tecnología. Con el apoyo del Gobierno, creo que podemos convertir a Londres en la capital mundial del Fintech«, añadió Osborne.

La propia Comisión Europea ha recomendado, en más de una ocasión, regular el sector de las divisas virtuales para poder controlar los procesos de lavado de dinero y financiación al terrorismo que de esta actividad pueden derivarse. El hecho de que ningún banco central ni Estado controle la emisión o el tráfico de estas divisas digitales, encriptadas virtualmente, explica, en parte, la preocupación que conlleva fomentar el uso de esta moneda entre los distintos países, entre ellos, Rusia o China, quienes han prohibido incluso su uso a pequeña escala.

Otro de los principales inconvenientes que presenta Bitcoin consiste en que su valor fluctúa en función de los usuarios que empleen la divisa, hecho que provoca grandes cambios en su cotización, lo que ha llevado a que muchos usuarios la utilicen con fines exclusivamente especulativos. Entre las principales ventajas se encuentran, precisamente, que en un momento en el que el comercio electrónico no deja de expandirse, las características de las monedas digitales resultan ideales para facilitar las transacciones internacionales.