Según los servicios de Inteligencia, altos dirigentes de la banda terrorista han exigido al Gobierno una serie de condiciones previas, que “faciliten” la emisión de un comunicado de ETA en el que se anuncie el abandono definitivo de las armas y se produzca el proceso de paz en Euskadi.
El comunicado está previsto que se emita con motivo del Gudari Eguna (Día del Soldado Vasco), el cual, es celebrado por la banda terrorista cada 27 de septiembre.
La cartelería empleada de cara al Gudari Eguna de este año no ha pasado inadvertida para los servicios de Información. Veamos una copia de dicho cartel promocional, en el que podían leerse frases como las siguientes:
“Ya está decidido y no podemos hacer nada” (Hablan de una posible solución al conflicto vasco).
“No podrán decir que estamos juntos en esto” (Aludiendo también a su distanciamiento con la izquierda abertzale).
Se establecen comparaciones entre el pueblo vasco y el Cantábrico, un “mar que no avisa antes de atacar, pasa de la calma a la agitación en un instante”. Los expertoshan interpretado esta afirmación como una advertencia: “ETA tampoco avisará”.
Dichos carteles, muy conciliadores todos, son interpretados como “poco esperanzadores”, aunque esta vez han evitado mostrar referencias de gente armada, sino que han optado por “un mar y el arrano beltza” (águila negra), estableciendo una metáfora entre ETA y su lucha armada: “ETA siempre está presente, vigilando en todo momento”.
Pero volviendo al comunicado, veamos cuáles son las ideas fundamentales que recoge dicho texto.
Fuentes de la lucha antiterrorista consultadas, han comentado que, según de la información de que disponen, éste sería el contenido del comunicado de ETA.
“No dejamos de intentarlo”. De este modo, ETA insistirá en la idea de que están “haciendo todo lo posible” para solucionar el conflicto vasco, como ellos lo llaman, pero que se están encontrando con una serie de trabas y obstáculos que impiden su resolución.
“Nosotros nos movemos, pero el Gobierno continúa inamovible en sus postulados, no nos permitís avanzar”.
ETA acusará al Ejecutivo de Madrid de estar poniendo continuas trabas al proceso de paz en Euskadi, y que por el “sendero de la represión”, no se solucionará nunca.
Además, pretenden que el Gobierno muestre “algún gesto significativo” como por ejemplo la derogación de la doctrina Parot, la cual, permitiría la puesta en libertad anticipada de unos 50 presos de ETA. Entre ellos, algunos de los más sanguinarios, como Inés del Río, José Ignacio Gaztañaga Bidaurreta o Domingo Troitiño, condenados por la masacre sucedida en el Hipercor de Barcelona.
Además, exigen también una serie de beneficios penitenciarios a los etarras encarcelados, como la liberación de presos enfermos, el acercamiento de los mismos a cárceles del País Vasco o permitir el regreso de los “refugiados” en el extranjero.