Cada familia es un mundo con sus propias características, por lo que no existen soluciones universales que puedan aplicarse de forma generalizada a todas ellas.
Es por esta razón, que os queremos presentar las ventajas y los inconvenientes de cada una de las 2 opciones, y que seáis vosotros mismos los que decidáis cuál es la opción que mejor se adapta a vuestras necesidades o expectativas.
Ventajas de la guardería
La diversidad de horarios os permitirán ir a trabajar tranquilos.
Se encargarán de ellos personas preparadas y con experiencia en el cuidado de niños.
Aprenderán cosas nuevas y disfrutarán de la compañía social de otros pequeños.
Económicamente suele ser más barato que contratar una niñera.
Inconvenientes de la guardería
No recibirán una atención personalizada.
Pueden contraer resfriados y gripes, contagiándose de otros niños.
Estará expuesto al clima todos los días, sin la posibilidad de dejarlo en casa si llueve, nieva o hace mucho frío.
Deberán acostumbrarse a un ambiente completamente nuevo para él, lo que en un primer momento puede provocarles una sensación de ansiedad.
Ventajas de la niñera
El bebé estará junto a sus cosas y en su ambiente, pudiendo descansar tranquilo en su cuna o en su cochecito.
Si se encuentra en casa, será más fácil respetar sus rutinas de siesta y comidas.
No estará expuesto al clima en los peores días del invierno.
Podréis controlar todo lo que sucede a lo largo del día con el bebé, como por ejemplo, qué come, a qué hora duerme, con qué juega, etc…
Al no estar en contacto con otros niños, el bebé estará menos expuesto a contraer o contagiarse de gripes y otras enfermedades.
La niñera podrá estar disponible en los horarios que a vosotros os convengan.
Inconvenientes de la niñera
Encontrar una niñera adecuada es una tarea complicada. Por lo general, son niñas muy jóvenes que al poco tiempo se dan cuenta de que el trabajo no es para ellas.
Económicamente suele ser más caro que una guardería.
Toda la familia, incluso vosotros, se tendrá que acostumbrar a que haya una persona ajena a la familia dentro del hogar.
Independientemente de si optáis por la guardería o por la niñera, es fundamental que busquéis una persona cariñosa que le proporcione, con responsabilidad, todos los cuidados que vuestro hijo necesita.
Por supuesto que nadie podrá reemplazaros, pero si no os queda más remedio que volver a trabajar, no sufráis, lo importante será que cuando regreséis a casa del trabajo, podáis ofrecerle toda la atención posible a vuestro bebé, hecho que él valorará enormemente con el paso del tiempo.