El Tribunal Supremo, recogiendo el recurso impuesto por CCOO, declaró “nulo de pleno derecho” el Real Decreto que restringía la obligatoriedad de dar de alta como cotizantes en la Seguridad Social a los jóvenes universitarios o estudiantes de Formación Profesional, que recibieran una remuneración económica durante sus prácticas laborales en empresas.
Desde la propia Universidad, han calificado esta medida de “peligrosa”, ya que la necesidad de incrementar los gastos por trabajador de estos becarios, puede llevar a las empresas a reducir la firma de contratos de estos jóvenes.
Para poder contextualizar esta situación, es necesario trasladarse al 2011, concretamente al mes de febrero, cuando el Gobierno de José Luis Zapatero decidía aprobar una serie de reformas en materia laboral, entre las que se encontraba un paquete de medidas para mejorar y aumentar la cotización de jóvenes y mujeres.
De este modo, se establecía que las empresas debían dar de alta obligatoriamente a todas aquellas personas que participaran en programas de formación remunerados, vinculados a la Universidad o la FP. La normativa entraría en vigor aquel mes de noviembre, donde más de 41.000 estudiantes becarios comenzaron a cotizar en la Seguridad Social.
Sin embargo, dos semanas después, el Ejecutivo cambiaría de opinión y aprobaría un nuevo Real Decreto por el que se anulaba dicha obligatoriedad. Fue en ese momento, cuando CCOO decidió interponer un recurso ante el TS por dicha decisión, el cual, fue admitido a trámite y actualmente se ha vuelto a restablecer la obligatoriedad de cotización en los contratos de prácticas.
Según Fernando Zulaica, Vicerrector de Estudiantes y Empleo de la Universidad de Zaragoza, “la sentencia del Tribunal Supremo pondrá en una situación complicada a las universidades y sus programas de integración laboral, como por ejemplo, la FP Dual, ya que ante esta situación, muchas empresas podrían perder el interés en participar en los programas de prácticas y de formación integral ofrecida tanto por éstas como por los centros de Formación Profesional”.
No obstante, Zulaica ha querido aclarar que “en principio, la sentencia del Supremo sólo afectará a los becarios que todavía estén cursando sus estudios, ya que las prácticas que realizan no son un empleo propiamente dicho, sino un complemento a su formación teórica”.
Es por ello que Zulaica espera que el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte, a través de su titular, José Ignacio Wert, “intente solucionar esta situación irregular evidenciada por el Supremo, y deseche la obligatoriedad de cotización de los becarios, la cual, sólo provocaría una reducción de oportunidades para los estudiantes, así como un empeoramiento de su propia capacidad de empleabilidad en un futuro”.