A pesar de los esfuerzos del Gobierno, las grandes fortunas de España siguen sin confiar en la Amnistía Fiscal. Asesores económicos de grandes multinacionales recomiendan a sus clientes que eviten esta forma de “blanqueo legal”, ya que piensan que podría declararse ilegal y se verían obligados a declarar el patrimonio evadido real.
La situación se ha visto agravada desde el pasado mes de julio, cuando el Tribunal Supremo admitió a trámite los dos recursos presentados por el PSOE contra los Decretos Ley que regulan la aberrante Amnistía Fiscal del ministro Cristóbal Montoro, desde ese momento, los asesores fiscales de las grandes fortunas se están mostrando mucho más desconfiados con apoyar dicha medida.
La razón de tal rechazo radica en la posibilidad de un más que probable fallo del Supremo a favor de los recursos interpuestos por el PSOE, lo que provocaría la derogación de la Amnistía, lo que traducido a efectos prácticos, significaría que los efectos de esta medida desaparecerían junto a ella, provocando que las fortunas blanqueadas que se hubieran acogido a este proceso, tributarían la totalidad de los impuestos que les correspondiera y no sólo un 10% como establece esta norma.
De este modo y ante la posibilidad de que el Supremo acabe dando la razón al PSOE, los expertos en asuntos fiscales están aconsejando la práctica de otros métodos de blanqueo más tradicionales para sus clientes, como por ejemplo, la típica creación de sociedades fantasma afincadas tributariamente en paraísos fiscales.
Esta infamia vestida de ley y llamada Amnistía Fiscal ha producido un efecto paradójico en su finalidad, ya que pese a que está pensada y diseñada para los grandes patrimonios de grandes empresas, según la opinión generalizada de los expertos fiscales, serán las PYMES y los autónomos los que terminarán por acogerse a dicha medida debido a la ausencia de asesoría fiscal y a la imposibilidad de establecer su actividad económica fuera de nuestras fronteras.