España mantendrá tropas desplazadas en Afganistán hasta que los países aliados decidan que puedan regresar. El PP ha asegurado que aplicará dicha medida como una forma de “lavar” la imagen del país, tras su “vergonzosa” salida de Irak, hace 7 años.
Esto es lo que ha escuchado mi “enano infiltrado”, en los mentideros oficiales del Partido Popular.
La estrategia en política exterior, respecto a las misiones militares internacionales en las que España participa, es que “no se moverán ni un palmo”, en caso de que la formación acceda al gobierno tras el 20 de noviembre.
“Lo más importante para nuestro ejército es intentar recuperar el prestigio perdido, porque Zapatero se equivocó al decidir retirar las tropas de Irak”, confiesan.
“Fue una retirada vergonzosa y sin honor, que produjo mucho daño a la política exterior de España”, añaden.
Pese a que la retirada de las tropas españolas estaba programada para que se iniciara en 2012 y finalizara en 2014, momento en el que regresarán a la Península el grueso de las fuerzas desplegadas hasta el país asiático.
Sin embargo, desde los más altos despachos de la Alianza Atlántica (incluido el del secretario General), se muestran reacios ante la idoneidad de este “calendario”.
Las fechas actuales de repliegue se han establecido siguiendo lo establecido en los planes del presidente norteamericano, Barak Obama, quien de todos modos, deberá presentarse a la reelección en 2012. Mientras, la OTAN sigue “dejando caer” que la misión podría ampliarse más allá de 2014.
“Si nuestros aliados deciden que hay que mantenerse en Afganistán, nos mantendremos. Lo realmente importante es que España recupere el nivel diplomático que ha perdido durante estos últimos años y reafirmar nuestro compromiso y lealtad a lo que decida la comunidad internacional”, concluyeron dichas fuentes.