La Cámara legislativa europea ha rechazado varias enmiendas que se iban a incorporar al proyecto presupuestario, que supondrían la supresión de determinados privilegios económicos de los que gozaban los eurodiputados.
Entre esas propuestas, se encontraban la rebaja del sueldo de sus señorías, y la justificación de las facturas durante los viajes en business y de las correspondientes dietas.
Según fuentes consultadas, la primera de las iniciativas para reducir el salario de los eurodiputados, fue llevada al parlamento por los “populares españoles” a su Grupo representativo en Bruselas.
Sin embargo, parlamentarios del PP han confirmado también que “la iniciativa no fue aceptada por sus colegas europeos”, rechazaron incluir la enmienda alegando que “resultaba imposible su aprobación sin modificar el Estatuto de los Eurodiputados”.
Un argumento similar utilizó Jerzy Buzek, Presidente de la Cámara europea, para descartar del debate presupuestario la exigencia del eurodiputado portugués de la Izquierda Unitaria, Miguel Portas, quien reclamó “la reducción de un 5% del sueldo” de sus señorías.
Fue el mismo parlamentario, que el pasado verano desató la polémica sobre la justificación de los vuelos en business de sus compañeros en Bruselas y cuya propuesta, recibió el apoyo de 41 firmantes, entre los que estaban cuatro españoles: Francisco Sosa Wagner (de UPyD), Ramón Tremosa (de CiU), Oriol Junqeras (de Esquerra), y Raúl Romeva (de Iniciativa).
Las fuentes antes citadas confirman que Portas también solicitó incluir una enmienda que “exigiera a los eurodiputados justificar los gastos en sus dietas”.
No obstante, y pese a que dicha propuesta “sí tiene muchas posibilidades de ser debatida y votada en el Parlamento”, los parlamentarios consultados se muestran reticentes respecto a que la propuesta prospere: “Los Grupos Socialista y Popular la rechazarán automáticamente, pese a que pueda haber votos independientes a favor”.