Para poder comprender cómo funciona el mercado de las Apps de pago para dispositivos móviles, cómo conseguir rentabilizarlas de forma continua, y por supuesto, cómo competir en un mercado tan saturado contra las Apps gratuitas, pondremos el siguiente ejemplo:
Imagina que tienes una gran idea para desarrollar una App, pasados unos meses, te decides a lanzarla para iPhone, cobrando 1,79 euros por descargarla. En principio, tienes un cierto éxito y consigues que se la descarguen unas 2.000 personas en unas cuantas semanas, obteniendo unos ingresos aproximados de 2.500 euros antes de impuestos (1,79 * 70% (30% comisión Apple) * 2.000). En ese momento, sientes que estás ante la oportunidad de tu vida y decides lanzarla ahora para Android.
Durante los siguientes meses, necesitas obtener el doble de beneficios, ya que ahora tienes el doble de gastos, además de los gastos asociados al mantenimiento de los usuarios antiguos. Las ventas y las críticas son favorables, y por lo tanto, decides que ambas versiones de la App se sincronicen a través de una API (interfaz que permite comunicar una aplicación con diferentes software), la cual, también decides que se desarrolle para iPad.
Posteriormente, los gastos se triplican o cuatriplican, ya que no sólo debes contratar a dos desarrolladores distintos, uno para cada sistema operativo y un diseñador que se centre en la UI (interfaz de usuario) y en la UX (experiencia del usuario), sino también, tú mismo debes concentrar tus esfuerzos en el marketing, destinando más dinero en publicidad para que tu App sea más conocida.
Además a medida que crezca el número de usuarios, el coste de los servidores y de las actualizaciones será mayor, ya que una App que no se actualiza con cierta frecuencia, acaba siendo rechazada por los usuarios.
Finalmente, ante el mantenimiento de dichos gastos, necesitas fundamentalmente que los ingresos procedentes de los nuevos usuarios paguen los costes de mantenimiento de los antiguos, porque de lo contrario, comenzarías a tener problemas de flujo de liquidez en la caja.
Este modelo de negocio sigue un esquema muy similar al sistema Ponzi, un negocio piramidal donde los nuevos inversores son los que se hacen cargo de pagar a los antiguos, y donde nunca existe una persona física responsable de garantizar los pagos.
Ante este panorama, podemos optar por otros modelos de negocio alternativos para las Apps de pago, como por ejemplo, el de la suscripción, donde imitaremos el ejemplo seguido por WhatsApp.
Modelo de negocio de Whatsapp
En tan sólo 4 años de vida, Whatsapp han conseguido obtener más de 300 millones de usuarios activos, de los cuales, casi la mitad han optado por pagar la suscripción, proporcionando a sus creadores unos beneficios anuales aproximados de 93,45 millones de euros (0,89 x 70% (30% comisión Android) x 150M) + 8M proporcionados por el fondo de inversión Sequoia.
Considerando que sus gastos anuales rondan los 20 millones de euros anuales (empleados en Silicon Valley + el coste de mantenimiento de los servidores), tenemos un modelo de negocio que genera más de 70 millones de euros al año.
Ahí radica la importancia de la suscripción anual, ya que el negocio no sería sostenible si los usuarios sólo pagaran una vez por la aplicación. La clave radica en que, primeramente, lanzas la aplicación de forma gratuita para poder captar y hacerte con la mayor cota de mercado posible, posteriormente, ofreces una suscripción anual de bajo coste para asegurar que, al menos, la mitad de los usuarios opten por abonarla, y finalmente, comienzas a generar beneficios todos los años.
Este modelo de negocio podemos clasificarlo como mixto, ya que aunque la App es de pago, muchos usuarios siguen disfrutando de ella sin necesidad de abonar cantidad alguna, aunque eso sí, sin disfrutar de todas las posibilidades y actualizaciones de la aplicación.
Sin embargo, en este momento surge una pregunta importante: ¿cómo competir con las Apps gratuitas?
Competitividad frente a las Apps gratuitas
La tendencia es clara, la mayoría de Apps serán gratuitas con versión de pago en un futuro cercano, no obstante, ahora mismo existe una fuerte competencia con las Apps gratuitas, ya que si un usuario encuentra tu aplicación, y es de pago, intentará buscar alternativas gratuitas que proporcionen un servicio similar y de relativa calidad.
Por lo tanto, aquí la clave radica en lanzar tu aplicación de forma gratuita, y una vez establecida, lanzar una versión de pago con opciones extra pero que nunca haga parecer a la gratuita como una versión limitada, ya que esto no suele agradar al público y opta por desinstalar incluso la gratuita.
En este mismo sentido, tampoco es recomendable lanzar una App de pago, y a los pocos meses, lanzar una nueva aplicación, también de pago, con más funcionalidades, ya que no sólo provocaría el cabreo generalizado entre los usuarios, ejemplo que ya ha sucedido con alguna empresa, que a los pocos días de aplicar este método ha tenido que retirar la aplicación, sino también, que el ranking de Apps con más descargas e ingresos disminuyera tanto en Google Play como en la App Store, ya que se estaría diversificando el mismo producto.
Por último, resulta curioso mencionar como el sistema que no funciona con las Apps, sí que puede funcionar con los juegos, un modelo de negocio muy particular y agresivo.
Modelo de negocio de las Apps de juegos
Los juegos son un tipo de aplicación especial, no tiene nada que ver con las aplicaciones normales, ya que por regla general, se suelen disfrutar durante sólo unos meses como máximo, y los desarrolladores lo saben, por ello, continuamente se lanzan al mercado versiones y versiones similares de lo mismo, con pequeñas diferencias.
De este modo, el modelo de negocio aquí se basa en lanzar juegos de forma gratuita, pero luego incluir diferentes posibilidades de pago, como por ejemplo, pagar por adquirir objetos que nos ayuden a pasar el juego más fácilmente, pagar por personalizar nuestro personaje, o también, pagar por disfrutar de expansiones del mismo como más niveles, más objetos o más opciones.
Para comprobar si realmente este modelo funciona, simplemente es necesario consultar el ranking de Apps con más ingresos en Google Play o la App Store.