Cómo realizar podas esculturales

Si deseas cautivar a tus invitados con el paisaje de tu jardín, te recomendamos transformar los setos en esculturas creativas.

Se suele emplear el término «topiary» para referirse al arte de podar setos y arbustos dándoles diferentes formas, y a pesar de que sorprenderán a quien las contemple, también requerirán de mucho trabajo y paciencia.

Realiza las podas esculturas en la época del año más propicia para ello, es decir, para un arbusto que florece antes de junio, el mejor momento será a finales de verano, mientras que para uno que florezca después de dicho mes, lo mejor será hacerla durante el invierno.

Primeramente, escoge un diseño para cada arbusto que desees esculpir, el cual, deberá coincidir con la forma natural, es decir, resultará más sencillo hacer un cono, una espiral, o una circunferencia si el árbol ya dispone de dicha forma.

Antes de comenzar, poda todas las ramas que sobresalgan de la estructura principal del árbol, cortando además las ramas para que tengan la misma altura que el resto.

Comienza a darle la forma de la escultura que deseas crear, comenzando por la parte superior. Si la planta es más alta que tú, utiliza una escalera o un taburete para poder trabajar con más comodidad.

Si escoger una forma cónica, comienza cortando “a ojo” para elaborar la forma básica, para después, ir podando la parte superior formando una figura triangular, donde el extremo superior deberá concluir en punta, justo encima de la rama principal.

En el caso de que queramos diseñar una forma redondeada, empieza cortando las ramas de arriba en arcos con forma descendente, para así poder redondear después la parte superior del arbusto.

Posteriormente, continúa podando la parte inferior hasta que finalices la escultura. Cuando lleves ya un rato, aléjate del arbusto y obsérvalo a una distancia de entre 1,5 y 2 m, para asegurarte de que el diseño está adquiriendo la forma deseada, y luego continúa podando.