Los sentidos son los medios de los que dispone el ser humano para percibir y disfrutar del mundo que le rodea, por ello, una de las mejores maneras que tienen los padres de pasar tiempo junto a su bebé, es ayudándole a conocer ese mundo, estimulando todos sus sentidos.
Estimular los sentidos de un bebé puede hacerse de mil maneras diferentes, aunque siempre se aconseja que sea mediante el juego y la diversión, de este modo, a la vez que se pasa tiempo junto a él, se fomenta la creación de un vínculo entre ambos.
Juegos para estimular los sentidos del bebé
Algunos de los juegos que pueden llevar a cabo los padres para estimular los sentidos de sus hijos son:
El arcoíris. Este juego ayuda a trabajar la vista, y dado que para los bebés la luz es transparente, les atraerá mucho si disponemos de una bola de cristal biselado que divida los rayos del sol en diferentes espectros, o aprovechar en verano y crear un arcoíris con el chorro de agua de una manguera.
El despertador. Este juego estimula el oído, es muy sencillo y puede realizarse con uno o varios niños a la vez. En una habitación, sin que los niños estén presentes, esconderemos un despertador, el cual, habremos programado para que suene en 2 ó 3 minutos. Una vez escondido, los niños entrarán y deberán encontrar el despertador siguiendo su sonido.
La mariposa nocturna. Esta actividad desarrolla el olfato y debe llevarse a cabo con varios niños, los cuales se dividirán en dos grupos, un grupo hará de mariposas hembra y el otro de mariposas macho. Las hembras se perfumarán y se esconderán sin que los machos las vean. Una vez escondidas, los machos deberán encontrarlas por el olor de su perfume.
¿A qué sabe? Este juego estimula el gusto, y aparte de ser muy sencillo, es muy completo. Previamente se han de preparar varios cuencos, cada uno con un alimento diferente (dulce, salado, ácido, amargo, etc…). Uno de los niños se vendará los ojos y el resto, elegirá qué tiene que probar. El niño deberá adivinar de que se trata.
¡Tócalo! Sencillo juego para desarrollar el tacto en los pequeños. En una bolsa opaca introduciremos varios objetos que no puedan dañar al niño al tocarlos, por ejemplo, una fruta, un juguete, un cepillo, un pañuelo, etc… A continuación, se invitará al niño a que toque uno de los objetos, el cual, deberá adivinar sin mirarlo.