El momento del baño del bebé puede ser uno de los momentos más agradables del día para el pequeño, aunque en ocasiones, el placer se transforma en tragedia y, sin previo aviso, al pequeño le da un miedo terrible el agua y la experiencia del baño.
Las causas de este rechazo suelen ser desconocidas, aunque suelen asociarse a algún suceso traumático con el agua, el cual, puede haberse producido incluso antes de nacer.
No obstante, podemos intentar subsanar ese miedo mediante el juego, una actividad que practicándolo durante el baño, haremos que se olvide de esos miedos recientemente adquiridos.
Introducir juguetes en la bañera
Desde el clásico patito amarillo hasta libros infantiles diseñados específicamente para jugar durante el baño, pueden ser utilizados para distraer al pequeño durante el tiempo de baño, haciéndole olvidar sus miedos.
La idea es que asocie el momento del baño con una experiencia lúdica y divertida, en lugar de con un evento traumático.
Preparar un baño para dos
La inseguridad es una de las principales causas que provoca el rechazo del niño al agua, por lo que una forma de conseguir que se sienta más seguro y cómodo consistirá en compartir el baño con él.
Además de verse protegido, el bebé vivirá el baño como una experiencia placentera que le permite sentirse más cerca de su padre o madre. En este caso, lo ideal será que el progenitor se introduzca primero en el agua para que el pequeño anticipe lo que sucederá, y una vez dentro, se podrán iniciar diferentes juegos con el niño para hacer la vivencia más divertida.
La búsqueda del tesoro
La inmersión o sentir el agua sobre la cabeza y la cara es el momento que más suelen rechazar los pequeños con miedo al baño, por lo tanto, una buena idea para habituarlo a este contacto consiste en ponerle unas gafas de bucear para que busque con ellas pequeños tesoros colocados en el fondo de la bañera.
Hacer pompas de jabón
La misma espuma y el jabón de la bañera servirán a los pequeños para crear divertidas pompas jabonosas que les harán, no sólo pasar un rato divertido, sino evadirse por completo de los miedos al baño.
En este caso, con una simple pajita, le enseñaremos a soplar la espuma del baño, observando como empiezan a crecer las pompas. También podremos utilizar moldes de juguete para diseñar pompas con diferentes formas.