La ciudad de Shanghái ha decidido anunciar que dispondrá de una red de 6.000 puntos de recarga de baterías para el año 2015, con el objetivo de promover el uso de vehículos eléctricos o híbridos en su compromiso contra la contaminación atmosférica.
Las autoridades locales estiman que, para finales del próximo año, circularan por sus calles más de 10.000 vehículos ecológicos de este tipo, por lo tanto, resulta fundamental ampliar la red de puntos de recarga actual, la cual, se encuentra gestionada por la Compañía Eléctrica de Shanghái.
Por el momento, la ciudad dispone de 24 estaciones eléctricas especializadas y 2.020 puntos de recarga de baterías de automoción, en su mayoría, instalados junto a los concesionarios, en las zonas de oficinas y en las áreas residenciales, por lo que el siguiente objetivo consiste en extender estos puntos de recarga a los aparcamientos públicos.
El objetivo del Gobierno de Shanghái es que la ciudad presente un punto de recarga por cada 5 Km2 en el centro de la ciudad, y uno por cada 10 Km2 en los distritos suburbanos de las afueras.
Hace una semana, las autoridades de Shanghái anunciaron también su intención de promover la adquisición de coches eléctricos de las automovilísticas chinas BYD y BAIC, regalando los gastos de matriculación a quienes opten por dichas marcas.
La elección de estas marcas responde a que ambas mantienen en funcionamiento fábricas de vehículos eléctricos en la propia Shanghái, de ahí la razón por la que se quiere favorecer la adquisición de modelos ecológicos de fabricación local.
Dicha medida se debe en parte, a las instrucciones del Gobierno central anunciadas el pasado mes de noviembre, donde se ordenó a las administraciones de todos los núcleos urbanos (que se benefician de subsidios estatales para la compra de los vehículos ecológico), que en sus objetivos de promoción de este tipo de coches, incluyeran, al menos, un 30% de marcas de fuera de su propia región.
China, aquejada en sus grandes ciudades de problemas graves de contaminación y congestión urbana, a causa del tráfico excesivo, es uno de los países donde más se ha impulsado el desarrollo y el uso, tanto a nivel particular como público, de vehículos no contaminantes.