Elon Musk, co-fundador de Tesla Motors, anunció recientemente la intención de su compañía de poner en funcionamiento una mega-factoría de baterías de litio para vehículos eléctricos, con el objetivo de poder satisfacer las previsiones futuras estimadas de crecimiento en la producción de este tipo de vehículos, de tal modo que se consiga abaratar no sólo el coste de la batería, sino también, del vehículo al completo.
Entre los detalles filtrados, figura el número de empleos que generará la nueva factoría de baterías, en torno a los 6.500 en EEUU, así como la capacidad de producción, la cual, fabricará baterías para más de 500.000 vehículos al año.
No obstante, todavía no se conoce la ubicación exacta donde se instalará la fábrica, por lo que de momento, se barajan distintas localizaciones (Nevada, Arizona, Nuevo México y Texas).
La elección final dependerá no sólo de factores atmosféricos (sol y viento), sino también, del grado de optimización de costes que se pueda aplicar en cuanto temas logísticos, operativos y legales. Así pues, todo hace indicar que la elección final no se conocerá hasta finales de este mismo año.
Para llevar a cabo este proyecto, Tesla ha anunciado que emitirá una serie de bonos convertibles por valor de 1.600 millones de dólares a través de una oferta pública de participaciones. Así pues, y según los planes de la propia Tesla, la fabrica podría estar operativa a comienzos de 2017, coincidiendo con el lanzamiento de su nuevo modelo más asequible, vehículo para el que irán destinadas las nuevas baterías.