Los conejos son, sexualmente hablando, unos animales muy maduros, ya que a partir de los 4 ó 5 meses ya son capaces de reproducirse, aunque resulte preferible esperar hasta los 8 meses de edad. La época de reproducción puede darse a partir de este momento y hasta los 4 años.
Es recomendable que la hembra no tenga más de dos partos por año, ya que el esfuerzo y el desgaste que supone el embarazo, el parto y la crianza de los pequeños conejos baby, podría enfermarla.
El mejor momento para el apareamiento de los conejos, es la época de celo. En la hembra, esta época está casi siempre presente, extendiéndose durante un periodo de 12 días, al que le siguen 4 días en los que no ovula, y así se va repitiendo este ciclo a lo largo de su vida.
Para tener éxito en la reproducción de los conejos, hay que seguir una serie de pautas:
– Asegurarse de que la hembra está en celo.
– Llevar a la hembra a la jaula del macho, ya que así éste se sentirá más cómodo y la hembra estará más predispuesta, mostrándose menos arisca.
– Bastará con que estén un par de horas juntos. La cópula dura entre 15 ó 20 segundos, y se sabrá si es exitosa cuando el macho se deje caer exhausto.
– Si la hembra rechazara al macho, se volverá a intentar al cabo de una semana.
Si el apareamiento ha sido exitoso, el comportamiento de la hembra cambiará, mostrándose más arisca y llegando, incluso, a atacar al macho. Si bebe mucha agua, amontona heno y se arranca el pelo de la barriga, no hay duda de que estará embarazada.
Cuando se noten estos síntomas, será necesario separar al conejo hembra del conejo macho, y acudir al veterinario especializado en animales exóticos para que la palpe y confirme la buena noticia.
Podrá aprovecharse la cita con el médico para solventar cualquier duda que se tenga sobre el embarazo, el parto, el post-parto y las posibles complicaciones que pudieran darse en dicho proceso.