Cuando se observa que un hámster pierde pelo, ya sea porque se ven bolas de pelo en la jaula o porque el propio hámster presenta calvas, puede ser que éstas pérdidas estén relacionadas o no con algún tipo de enfermedad.
En los casos menos preocupantes, es decir, cuando la caída del pelo no está relacionada con una enfermedad, éste hecho puede deberse a varios factores, que si no se tratan a tiempo, pueden derivar en alguna enfermedad que perjudique gravemente el estado de salud del hámster.
Dichas causas pueden ser:
– Roce constante con los accesorios de la jaula.
– Si conviven varios hámsters juntos, probabilidad de peleas y mordiscos entre ellos. Esto suele venir acompañado con pérdida de peso.
– Mala alimentación, ya sea por falta de vitaminas o de proteínas.
Estos casos tienen fácil solución, y si se detectan a tiempo, no suelen derivar en problemas serios.
Sin embargo, cuando la caída del pelo es causada por algún tipo de parásito, hongo u otro agente dañino para la salud del hámster, la vida de éste podría correr peligro si no se tratase adecuadamente.
Entre las enfermedades que provocan pérdida de pelo en el hámster, se puede destacar la sarna u otras provocadas por ácaros, la tiña, la diabetes o la presencia de tumores.
Por todo esto, si se observa la pérdida de pelo en el hámster, es aconsejable acudir a un veterinario experto en animales exóticos, para que le realice un examen médico que permita descartar o confirmar cuanto antes si se trata de un problema serio o no.
En cualquiera de los dos casos, es fundamental ofrecer al hámster una alimentación y una higiene adecuada, siempre pidiendo consejo al veterinario, y empleando para ello los accesorios que sean necesarios, desde un pienso elaborado para hámsters, hasta peines y champús adecuados a sus necesidades.