El desequilibrio tan descomunal de géneros en China obliga a muchos de los 18 millones de solteros chinos, a desplazarse a países como Vietnam o Brunei en busca de esposas serviciales, por las que llegan a pagar hasta 4.330 euros, si son vírgenes.
Los abortos selectivos de niñas en una sociedad claramente machista, han originado un desequilibrio entre hombres y mujeres de tal magnitud, que en 2020 habrá 24 millones de varones chinos sin la posibilidad de emparejarse.
Ante tan dramática situación, muchos solteros chinos se han decidido por comprar esposas procedentes de países como Vietnam o Thailandia, en donde agencias especializadas ofrecen estos servicios, “a partir de 900 dólares en tan sólo tres meses y con un año de garantía de reemplazo, en el caso de que la esposa pudiera escaparse”.
Y es que según un informe publicado por el portal chino “Souhu Jiaodian”, sobre el capital necesario para poder casarse, en Pekín, por ejemplo, se necesita una cantidad media de 317.000 dólares para disfrutar de una esposa.
Y es que la encuesta ha utilizado variables económicas como “el coste aproximado de una casa de 80 m2, los gastos en decoración (incluyendo artículos para el hogar, electrodomésticos y demás mobiliario), la compra de un coche y su mantenimiento, la organización de la boda, la celebración de la luna de miel (a Europa o Australia), y todo lo que se pudiera gastar durante el periodo de noviazgo”.
Sin embargo, muchos de estos “matrimonios adquiridos” se acuerdan sin el consentimiento de las futuras esposas, las cuales, llegan a ser raptadas o vendidas por su familia, obligadas a casarse y, en bastantes ocasiones, maltratadas y prostituidas, ante una posible insumisión. Es por esto, que desde hace varios meses, los nuevos compradores están exigiendo una garantía por si su esposa decide escaparse.