El científico israelí Daniel Shechtman, ha sido galardonado en solitario con el Premio Nobel de Química 2011 por su trabajo en el descubrimiento de los cuasicristales.
La Real Academia de las Ciencias de Suecia ha querido reconocer con este premio, el descubrimiento de los cuasicristales, un trabajo “excelente, solitario, tenaz y basado únicamente en sólidos datos empíricos”.
Schechtman demostró, enfrentándose al paradigma científico imperante, que “las estructuras que configuran los cuasicristales no son periódicas, es decir, que dichos materiales no pueden ser construidos mediante la repetición y yuxtaposición de unidades menores, de forma similar al diseño de un mosaico árabe”.
Los cuasicristales, también conocidos como sólidos cuasiperiódicos, son “pésimos conductores de la electricidad y extremadamente resistentes a la deformación inducida por fricción o calor”, por lo que son utilizados para fabricar recubrimientos protectores antiadherentes.
Shechtman, nacido en Tel Aviv en 1941, ejerce desde 1972 como investigador en el Instituto de Tecnología de Haifa, convirtiéndose este miércoles, en el único ganador en solitario de los Premio Nobel 2011 relacionados con el ámbito científico, ya que el resto de los galardones fueron compartidos.