La llegada de Pedro León al conjunto blanco se produjo hacía ya más de un año, provocando un revuelo mediático junto a otra de las estrellas emergentes del fútbol nacional, Sergio Canales. Sin embargo, José Mourinho nunca tuvo un especial feeling con el murciano, apartándolo del equipo para forzar su salida, hecho que provocó que el jugador reclamara la presencia de un inspector de trabajo que certificara sus condiciones de trabajo.
Pedro León, a través del Presidente de la AFE Luis Rubiales, interpuso una denuncia contra el Real Madrid acusándolo de “mobbing” (acoso laboral), debido a que ha tenido que desempeñar su trabajo en solitario, sin la presencia de sus compañeros, hecho que no se contempla en el convenio colectivo de los jugadores.
Hace ya tiempo que puso su caso en manos de un abogado laboralista, tras conocer que no viajaría a la Gira de EEUU con el resto de la plantilla pese a estar en perfectas condiciones físicas.
Por este motivo, ayer por la mañana se presentó un inspector de trabajo en Valdebebas (ciudad deportiva del Real Madrid) para levantar acta sobre la situación y presentarla como prueba en un posible juicio, hecho que no es único en el fútbol español, ya que la AFE ha realizado el mismo procedimiento con un centenar de jugadores a los que no se le permitió entrenar con sus compañeros.
A pesar de que los antecedentes dan la razón al jugador, lo que supondría que el Real Madrid tuviera que abonarle la totalidad del contrato, el jugador ha decidido no agotar todas las vías judiciales y tener que quedarse hasta enero en el club, por lo que regresa a la que fue su casa, una temporada después, en forma de cesión con una opción de compra obligatoria por unos 6 millones de euros (costó 12 millones).
Los motivos de este desencuentro total entre jugador y técnico son muchos y variados, aunque en realidad, nunca se sabrá que fue exactamente lo que terminó de convencer a Mourinho de que no podía contar con el jugador en plantilla, si fue su actitud poco solidaria sobre el campo, las cenas privadas con su ex-técnico Míchel o un encontronazo por los pasillos del Bernabéu cuya conversación no se ha podido conocer todavía, veremos si algún día se sabe.