Dar de mamar al bebé durante sus 6 primeros meses de vida y siempre que éste lo demande, es una de las principales recomendaciones de cualquier experto pediatra. Sin embargo, para llevarlo a cabo y cumplir esta tarea, la mujer suele encontrarse con trabas y dificultades tanto a nivel laboral como social.
A parte de la incorporación al trabajo, la necesidad de amamantar al bebé a demanda, es decir, cada 2 ó 3 horas, suele chocar con tabúes sociales que obligan a la madre a “ocultarse” para evitar dar el pecho a su bebé en público.
Así pues, gozar de autonomía e independencia para poder ir con tu bebé a cualquier sitio puede resultar complicado, sobre todo, cuando sabes que tienes que volver a las 2 horas para la siguiente toma. El pudor y la vergüenza personal chocan, en ocasiones, con los tabúes sociales, los cuales, no consideran un acto natural observar a una madre amantando a su hijo en un espacio público. Por este motivo, el deseo de mantener una lactancia prolongada, entre 6 meses y un año, suele evitarse.
Recomendaciones para una lactancia relajada en público
Veamos a continuación algunos trucos y recomendaciones para poder amamantar a tu hijo de forma tranquila y relajada en un lugar público, sin ser sometida a las miradas indiscretas del resto de personas:
– Levántate la ropa desde la cintura. Si llevas puesta una camiseta que puedes subir sobre tu pecho, podrás descubrirlo para tu bebé, pero cubrirás la parte superior, ocultando tu pecho de las miradas ajenas.
– Evita desabrochar la ropa desde arriba. Si desabotonas una blusa o un vestido desde el cuello, dejarás todo el pecho al descubierto y, si hace frío, el momento puede que te resulte incómodo.
– Lleva fulares, chales o toquillas. Pueden servirte para taparte el cuello desnudo o el pecho, y al mismo tiempo para arropar a tu bebé.
– Utiliza camisetas de lactancia. Poseen un diseño cómodo para descubrir los pechos fácilmente, basado en la superposición de dos telas en la zona del busto, lo que permite dejar una en la parte superior para una lactancia más discreta.
Por último, es importante recalcar que debido a que los pechos femeninos son percibidos como elementos sexuales, muchas mujeres sienten rechazo al hecho de amamantar a sus bebés en la vía pública o frente a personas extrañas.
Por este motivo, desde algunas asociaciones pro-lactancia materna, insisten en el hecho de que sean las propias mujeres las que vayan cambiando esta percepción social, y animen y apoyen a otras madres a considerar el amamantamiento en público como un acto natural y sin tabúes.